Samana del 26/11/06

Querido DiãlogoEcolñgico: éQué puedo hacer, como individuo solo, para ayudar a reducir el calentamiento global?

—Karen Cross, via e-mail`

La mayoréa de nuestras contribuciones directas al calentamiento global tienen su origen en las modalidades de transporte que elegimos. Para comenzar, los viajes aéreos queman mãs combustibles fñsiles por persona que cualquier otro tipo de transporte. De modo que si puede optar por otro tipo de viaje a larga distancia, Ud. puede reducir su contribuciñn a los gases de invernadero en forma dramãtica—suponiendo, desde luego, que el equivalente a un aviñn completo haga lo mismo.

El otro culpable grave en el ãrea de transportes es el automñvil privado. Usando el coche con menos frecuencia, compartiendo el carro, y usando el sistema de transportes püblicos como buses y trenes puede también disminuir en forma considerable la poluciñn y gases de invernadero que Ud. origina. Asimismo, piense en los numerosos viajes cortos por auto que pudiesen ser reemplazados por una buena caminata o viaje en bicicleta, los cuales no solamente cumplen con el objetivo sino que también proveen ejercicio vital.

Cuando el uso del auto es una necesidad, siempre esté seguro que el vehiculo esté bien afinado y que las gomas estén correctamente infladas, para asé conservar combustible. Si estã contemplando adquirir un nuevo carro, considere uno de los muchos hébridos que consumen poco combustible, y que frecuentemete vienen también con incentivos de impuestos.

En la casa, se puede combatir el calentamiento global comprando electrodomésticos que sean econñmicos en su consumo de energéa, y manteniendo los viejos en ñptimo estado, ya que las ineficiencias se traducen en desperdicio de electricidad. Y sencilamente minimizando la calefacciñn y enfriamiento de la casa puede asimismo reducir su contribuciñn individual al cambio climãtico y reducir las cuentas mensuales. En tiempo fréo, abréguese bien y duerma con frazadas calientes; durante los tiempos calurosos, use ropa ligera y abra las ventanas para producir corrientes de aire. Cuando salga, reduzca la calefacciñn o el aire acondicionado, or sencillamente apãguelos.

El aislamiento y sellamiento de la casa es otra forma espléndida de reducir el consumo de energéa. Y si su empresa de servicios püblicos ofrece opciones como energéa eñlica o solar, eléjalos, aunque cuesten un par de dñlares mãs—ya que es un precio énfimo a pagar por un planeta sano. Y no se olvide de plantar algunos ãrboles en su patio trasero. Durante sus vidas éstos eliminarãn toneladas de diñxido de carbono que de otra manera habréan contribuédo al calentamiento global.

El reducir o eliminar una dieta basada en carne y productos lãcteos es otra gran manera de combatir los cambios climãticos, a la vez que se mantiene la salud. Las vacas usadas para carnes y leche son alimentadas continuamente para maximizar su productividad, y como resultado emiten metano todo el tiempo durante su digestiñn. Segün Noam Mohr de la organizaciñn sin fines de lucro EasrthSave, el gas metano es 21 veces mãs nocivo que el gas de invernadero proveniente de nuestros sistemas de escape. Dada la proliferaciñn masiva del ganado alrededor del mundo, estas industrias contribuyen enormemente al calentamiento global. También, dejando los alimentos procesados con gran gasto de energéa que se encuentran en los supermercados, y que deben enviarse a través de grandes distancias, y consumiendo productos cultivados localmente puede reducir la contribuciñn personal a los gases de invernadero aün mãs que cambiar un auto normal por un hébrido.

Una serie de sitios web relacionados con los cambios climãticos, incluyendo CarbonFootprint.com y TerraPass.com, ofrecen "calculadores de carbono" de modo que cualquiera persona pueda estimar como sus acciones afectan al calentamiento global. SafeClimate.net ayuda a negocios de cualquier tamaño a tomar medidas benéficas con respecto al problema de cambios climãticos.

CONTACTOS: EarthSave; Carbon Footprint; terrapass; SafeClimate.


Querido DiãlogoEcolñgico: éSon los retardadores de llama utilizados en muchos productos como precauciñn de seguridad peligrosos para la salud? Y en la afirmativa, équé se puede hacer para evitar contacto con ellos?

—Katya, via e-mail

Los retardadores de llama estãn en auge en los Estados Unidos y Canadã, especialmente en el rellenado de alfombras, almohadones de espumilla, artéculos de dormitorio y vestuario, papel decorativo de pared, y los gabinetes de plãstico de computadores, faxes y otros productos electrñnicos. La mayoréa son hechos a base de éter difenil polibrominado (PBDE, por sus siglas en inglés).

Segün el Departamento de Ecologéa del estado de Washington (WSDE), en estudios de laboratorio algunos PBDEs han mostrado que pueden producir problemas en el desarrollo del cerebro de roedores. "La mayoréa de estos problemas tienen su origen en exposiciñn prenatal e inmediata tras el parto. Y los efectos de salud parecen ser permanentes", declara WSDE. Señalan, sin embargo, que los niveles en humanos no han alcanzado aün los niveles que causan problemas en los animales, pero que los cientéficos estãn preocupados porque estos niveles siguen aumentando.

Los PBDEs son "persistentes"—vale decir, no se descomponen sino permanecen activos en el aire, agua, tierra y alimentos. El WSDE dice que los PBDEs se estãn acumulando en los animales a través de la cadena de alimentos, apareciendo inclusive en las ballenas orca de la Sonda Puget en el estado de Washington y en los tejidos de los osos polares en el Artico.

Los PBDEs también se quedan en nuestros cuerpos, acumulãndose en los tejidos adiposos. Los Estados Unidos es el principal fabricante de PBDEs en el mundo entero, y los niveles encontrados en los norteamericanos son hasta 100 veces mãs altos que los que se ven en Europa, donde la mayoréa de los PBDEs fueron proscritos en 2001. Los niveles norteamericanos, dicen los cientéficos, se estãn doblando cada dos a cinco años. En gran parte, la exposiciñn humana ha sido a través del consumo de pescados, a pesar que los bebés pueden exponerse a través de la leche materna. Los niños también se exponen cuando usan piyamas de poliéster tratados con retardadores de llama. En efecto, los PBDEs fãcilmente dejan escapar gases de los mismos productos diseñados para proteger la salud de sus usuarios.

Los consumidores pueden tomar precaucionesy evitar productos que contengan PBDE. Entre otras precauciones, el Proyecto Niños Sanos [Healthy Children Project] recomienda comprar ropa, asuntos de cama, dormitorio y muebles hechos de fibras naturales, tales como algodñn y lana, qu

e no se derriten cerca del fuego y como tal no requieren retardadores de llama.

Otra forma de minimizar la exposiciñn es mantener una dieta baja en grasas animales, ya que las sustancias quémicas se acumulan en proporciones mayores en los animales que estãn mãs arriba en la cadena de alimentaciñn. Joyce Newman, con la Green Guide recomienda verduras, frutas y cereales en vez de carnes y pescados. Al elegir carne o pescado, ella sugiere cortar lo mãs que se pueda la grasa, buscando en general los cortes mãs livianos.

En lo que respecta a productos de consumo, WSDE señala que el sector empresarial debe reconsiderar el diseño de sus productos, con el fin de evitar materiales altamente inflamables, y separar o proteger los componentes incendiables de fuentes de calor. Algunos colchones, por ejemplo, utilizados en la actualidad en muchos hospitales y casas para ancianos emplean una "capa barrera" de material resistente entre la tela exterior y la espuma interna, satisfaciendo asé rigurosos reglamentos de seguridad contra incendios sin el uso de sustancias quémicas. No obstante, hasta que los gobiernos de Canadã y E.U.A. empiecen a tomar los peligros representados por los PBDEs en forma mãs seria, serã de responsabilidad de los consumidores individuales el guardar la salud de sus niños y familias.

CONTACTOS: Washington State Department of Ecology’s "Toxic Flame Retardants: The Buzz on PBDEs; Healthy Children Project; The Green Guide.