Semana del 20/2/11

© Pink Sherbet Photography/ Flickr

Querido DiálogoEcológico: ¿Cuáles son las últimas noticias sobre la cuestión de si el uso de teléfono celular causa cáncer?

— William Thigpen, por correo electrónico

Los teléfonos celulares sólo han sido usados extensamente por un par de décadas, que es un tiempo demasiado breve para nosotros saber conclusivamente si su utilización podría causar cáncer. Las investigaciones hasta ahora parecen indicar que la mayoría de la gente no tiene por qué preocuparse.

Según el Instituto Nacional del Cáncer, financiado federalmente, la radiación electromagnética de baja frecuencia que emiten los teléfonos celulares cuando los tenemos cerca de nuestras cabezas es de tipo “no-ionizante,” que no puede causar calentamiento de tejidos ni aumentos de temperatura corporal humana significativa que pudieran llevar a daño directo del ADN celular. Por contraste, las radiografías consisten en radiación electromagnética ionizante de alta frecuencia y pueden llevar a la clase de daño celular que tiene como resultado el cáncer. Sin embargo, algunos usuarios de teléfono celular e investigadores todavía se preocupan por nuestro uso de teléfono celular, dado cuánto los utilizamos ahora, y cuán poco sabemos de sus efectos potenciales a largo plazo.

La razón por la cual el tema sigue reapareciendo es que algunos estudios iniciales en Europa, donde el uso de teléfonos celulares se generalizó una década antes de EEUU, mostraron vínculos entre algunas formas de tumores y el uso asiduo del teléfono celular. En consecuencia, investigadores se organizaron para hacer un estudio más definitivo, llamado el estudio de “Interfono”, a través de 13 países entre 2000 y 2004. Los resultados, publicados en mayo de 2010 en la Revista Internacional de Epidemiología, leída por peritos, no indicaron mayores riesgos de desarrollar dos de los tipos más comunes de tumores cerebrales, el glioma y meningioma, a raíz del uso diario típico del teléfono celular. Los participantes en el estudio que reportaron pasar más tiempo en sus teléfonos mostraron un riesgo ligeramente más alto de gliomas, pero los investigadores consideraron este hallazgo no decisivo debido a factores como errores de memoria, según el cual participantes con tumores cerebrales podrían haber recordado el uso pasado del teléfono celular en forma distinta de los participantes sanos.

Los investigadores que buscan superar la ventana de trabajo relativamente breve y los errores de memoria del estudio Interfono lanzaron recientemente un estudio a más largo término, denominado COSMOS (Cohort Study on Mobile Communications), en Europa. Unos 250.000 usuarios de teléfonos celulares entre las edades de 18 y 69 y situado en Gran Bretaña, Finlandia, los Países Bajos, Suecia y Dinamarca participarán permitiendo a los investigadores rastrear su uso de teléfono celular y salud por más de tres décadas. Según un artículo en Reuters del 22 de abril 2010, el estudio tendrá en cuenta en el uso de dispositivos a manos libres, cómo las personas llevan sus teléfonos, y también prestará atención a vínculos con enfermedades neurológicas como Parkinson y Alzheimer.

Hay algunas precauciones que usted puede tomar para minimizar los riesgos que puedan existir. La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) sugiere reservar el uso de teléfonos celulares para conversaciones más cortas, o para oportunidades cuando un teléfono convencional no esté disponible. También, utilizar un dispositivo de manos libres coloca más distancia entre el teléfono y la cabeza, reduciendo apreciablemente la cantidad de exposición a la radiación. Si el hecho que muchos estados requieren dispositivos de manos libres para utilizar un teléfono celular al manejar no es suficiente para hacerle adquirir tal accesorio, quizá el riesgo de cáncer, temido o verdadero, lo haga.

CONTACTOS: National Cancer Institute; INTERPHONE Study; COSMOS Study; FCC.


Querido DiálogoEcológico: En su discurso del Estado de la Unión reciente, el Presidente Obama envisionó un millón de vehículos eléctricos en los caminos de EEUU para 2015. ¿Qué probabilidad tenemos de alcanzar ese objetivo?

— Jerry Mitlitski, Salem, OR

“Podemos romper nuestra dependencia en el petróleo…y llegar a ser el primer país con un millón de vehículos eléctricos en las carreteras para 2015,” el Presidente Obama dijo en su Discurso del Estado de la Unión en enero 2011. “El futuro está a nuestra disposición”.

© Quinn Dombrowski/Flickr
Es difícil de decir cuán probable resulte un objetivo tan arbitrario, pero líderes ambientalistas y otros están optimistas. La lista de espera para el nuevo Nissan Leaf totalmente eléctrico, saliendo de las líneas de montaje en estos momentos, listea unos 20.000 norteamericanos. La industria automovilística espera demanda semejante por otros nuevos coches eléctricos y enchufables híbridos entrando a los caminos de EEUU este año y el próximo de General Motors, Ford, Toyota, Mitsubishi y otros.

Por supuesto, la administración de Obama se da cuenta que alcanzar tal objetivo será imposible sin ayuda del gobierno federal. A ese fin, los consumidores y los negocios pueden conseguir créditos tributarios de hasta $7.500 por la compra de cada nuevo vehículo eléctrico (EV). Los federales también han cometido $2,4 mil millones para la investigación y desarrollo de mejoras tecnológicas de baterías tipo EV, y otros $115 millones para la instalación de infraestructuras de carga de EV en 16 áreas diferentes metropolitanas alrededor del país—sin contar unos $300 millones en subsidios para ciudades limpias a docenas de comunidades norteamericanas que trabajan para reducir el uso de petróleo, y los $25 mil millones a ser repartidos para ayudar a los fabricantes de automóviles de EEUU a reequiparse. Tanta participación federal ha ayudado a estimular a los gobiernos estatales y la industria privada a hacer también inversiones significativas en el sector EV.

Pero aún con todo esta financiación, un millón de EVs en los caminos para 2015 todavía podría ser sólo un sueño imposible. James Sweeney del Precourt Energy Efficiency Center de la Universidad de Stanford califica el plan como “muy agresivo”. Razona que tomó una década para los híbridos—que “no requerían ninguna diferencia en la infraestructura y tenían una gama tan grande como los vehículos convencionales, ninguno de los cuales es probable sean el caso con vehículos eléctricos’ —captar tres por ciento del mercado de auto de pasajeros y furgonetas de EEUU. Los EVs tendrían que lograr la misma cuota de mercado en sólo cuatro años si el objetivo de Obama es de lograrse. “Aún con una subvención grande, sería muy difícil alcanzar una cuota tan grande del mercado con tal rápidez,” concluye Sweeney.

Sin embargo, la Coalición de la Electrificación, una organización de dirigentes empresariales pro-EV de compañías que incluye a Nissan, Federal Express, Coda Automotive y Coulomb Technologies, discreparían de esa conclusión. El estudio del grupo de Noviembre de 2009, bautizado como Plan de Electrificación, predijo que hasta 14 millones de EVs podrían estar en los caminos norteamericanos para 2020 si los legisladores crean “ecosistemas de electrificación” en varias ciudades importantes de EEUU simultáneamente. Si el grupo está dondequiera cerca del blanco, alcanzando el objetivo de Obama de un millón de EVs para 2015 debería resultar cosa fácil. El grupo también dice que los EVs podrían representar hasta el 75 por ciento de todas las millas cubiertas por vehículos ligeros en EEUU para 2040.

Ahora si solamente pudiéramos también limpiar nuestro suministro de electricidad, entonces quizás podríamos realmente estar a punto de dar un magnífico paso para el planeta.

CONTACTOS: Precourt Energy Efficiency Center; Electrification Coalition.